lunes, 16 de marzo de 2015

Le preguntaré en la mañana

Es normal ver anuncios que nos digan que tenemos muchas cosas por las que ser felices, es aun mas común que otras personas nos lo digan; yo mismo me repito todo el tiempo que, sin importar la situación, siempre hay gente que la estará pasando mucho peor, que cada problema es solo una solución, y que los retos me ayudan a ser una mejor versión de mi.

Lamentablemente las ultimas 48 horas las he pasado tan metido dentro de mi cabeza que me sorprende haber sido capaz de mantener una conversación con otro ser humano. Es como cuando vas manejando y de repente te preguntas: "Como co*o llegue?" (el asterisco es solo porque no se poner una Ñ minúscula en mi teclado.. lo averiguare cuando termine la entrada). Hizo falta una descarga seria en mi cerebro para darme cuenta de lo egoísta que estaba siendo, de que pudo haber pasado alguien con un tatuaje que dijera "estoy deprimido" en la frente (metafóricamente) y sentarse junto a mi y quien sabe si lo habría notado (genial de parte de un futuro psiquiatra).

Supuestamente en momentos así debes imaginar que te gritas a ti mismo BASTA! (no funcionó para mi pero que eso no los detenga.. yo soy algo necio)

No escribo nada de esto para que alguien mas lo lea y decida que la empatía es una cualidad importante en la vida diaria y que no la valoramos lo suficiente, tampoco para decirles que deben ser felices porque hay gente que la pasa peor. Lo que quiero es dejar guardado como me siento en este momento, quiero que la próxima vez que algo me ciegue de lo que pasa a mi alrededor, pueda leer esto e imaginar una versión mía de 9 a*os (creyeron que era mentira lo de la Ñ?) diciendo "Estas siendo un idiota". A esa edad lo tenia todo resuelto. Luego llegó la pubertad, empezaron a gustarme las ni*as, Chavez se hizo presidente... muchas cagadas en muy poco tiempo.

Ya lo alargue lo suficiente para justificar una entrada, así que..
Buenas noches y hasta la próxima.


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